Probada en una joven de 21 años con daño cerebral, la BCI alcanzó una precisión de decodificación de habla en tiempo real del 71% con una latencia mínima. En solo cinco días, logró decodificar 142 sílabas chinas comunes con una precisión notable, utilizando señales cerebrales para mostrar caracteres en una pantalla.
En cuestión de días, la paciente pudo jugar videojuegos, usar su smartphone y controlar dispositivos inteligentes a través de la BCI, demostrando la versatilidad de la tecnología. Además, logró manipular manos robóticas para realizar tareas como recoger frutas y saludar en lenguaje de señas, e interactuar con modelos de IA.
La innovadora aproximación de NeuroXess evita el daño al tejido cerebral, ofreciendo esperanza para mejorar la calidad de vida de personas con discapacidades del habla y motoras, como la ELA y quienes han sufrido un accidente cerebrovascular. Esta tecnología fue desarrollada en colaboración con el Hospital Huashan, afiliado a la Universidad de Fudan, marcando un avance significativo en la neurotecnología china.