Ricardo Montoya.
Mario "N" el individuo que el domingo intentó secuestrar un avión de la empresa Volaris, también provocó un choque de una patrulla de la Guardia Nacional al momento de intentar escapar.
Luego de que fue sometido por un pasajero y entregado en el Aeropuerto Internacional de Guadalajara Jalisco a elementos de la Guardia Nacional, el individuo forcejeó con los oficiales al momento de ser conducido hacía la comandancia de la corporación policiaca.
Al parecer, pese a estar esposado, logró agredir de tal forma a los guardias nacionales que provocó que el que conducía perdiera el control del vehículo.
La patrulla chocó contra un local comercial.
Pese al choque, tanto el detenido cómo los oficiales y los encargados del negocio resultaron ilesos.
Al mediodía del domingo,tras sujetar del cuello a una azafata, y amenazar con enterrarle un
un lapicero, Mario "N" intentó ingresar a la cabina de un avión de la empresa Volaris que cubría la ruta El Bajío -Tijuana con el fin de desviarlo a los Estados Unidos.
Era el vuelo 3041, cuyo trayecto inició en el Aeropuerto Internacional de León, Guanajuato.
Aunque en un comunicado, la empresa Volaris señaló que la tripulación supuestamente actuó de acuerdo con los procedimientos de seguridad establecidos, en un video grabado dentro de la aeronave se ve que Mario "N" fue sometido por otro pasajero.
Incluso, cómo la esposa de Mario "N", le pidió que ya se tranquilizara mientras sus hijos, asustados comenzaron a llorar.
También como otra pasajera le pide a quien logró someterlo que no le hiciera daño.
De acuerdo a las autoridades, Mario "N" es originario de Pénjamo, Guanajuato, y viajaba con su familia a la ciudad de Tijuana, baja California.
Presuntamente, el individuo declaró que había recibido por su celular un mensaje en el que se le advirtió que lo iban a asesinar en cuanto saliera del aeropuerto de Tijuana.
Por ello, supuestamente, intentó desviar la aeronave.
Se ignora si realmente fue amenazado o no. Lo cierto es que pensamos, León y sí todo el estado de Guanajuato desde hace varios años se encuentra a su lado por la presencia de sangrientos grupos criminales entre ellos el Cartel de Santa Rosa de Lima y el de Jalisco Nueva Generación que se disputan la plaza.
A casi diario ocurren la ejecuciones, "levantones" y desapariciones forzadas de personas cuyos cadáveres después aparecen enterrados en fosas clandestinas.