Coludidos con Hermilo Trejo, y Alhely Medina, títeres de Willy Trejo alias "El Violinista" o "El Duende Maldito" en 70 días de gobierno, han puesto a Zimapán al borde de la guerra civil
#Tenebra | Ricardo Montoya.
A pesar de los miserables sueldos que pagan a los mineros, algunos de hasta 6 mil o 7 mil pesos al mes , y a los que no se les dota de ningún seguro médico ni de pensiones cuando se enferman de los pulmones, aunado a la contaminación que provocan al medio ambiente al arrojar a las comunidades originarias miles de toneladas de jales, los empresarios mineros de Zimapán reconocieron que se obtienen enormes ganancias de varios millones de dólares al mes.
En la conferencia de prensa que convocaron en Pachuca el viernes para justificar el paro de actividades que ellos mismos decidieron hacer para asustar a sus trabajadores de un posible cierre a consecuencia según ellos por la presencia del llamado Sindicato del Cemento,
Carlos Bravo, gerente de Carrizal Manning, dijo que la mina genera al mes 7 millones de dólares, que al cambio de 20 pesos por dólar equivale a 140 millones de pesos; es decir 70 millones cada 15 días o bien, 3.5 a la semana igual a medio millón de pesos al día equivalente a 25 mil dólares por jornada.
No obstante, las ganancias podrían ser más ya que Carlos Bravo dijo que con el paro de labores de los días miércoles, jueves y viernes, las pérdidas fueron de 600 mil dólares, es decir 200 mil dólares o 4 millones de pesos al día o 120 millones de pesos al mes.
Homero Vega, administrador de La Purísima y Preisan, afirmó que el paro de actividades ha provocado pérdidas por unos 300 mil dólares en cada una de las dos vetas, es decir 100 mil dólares igual a 2 millones de pesos diarios en cada una de las minas.
Con tales ganancias, que insisto podrían ser muchísimo más ya que habitualmente informan ganar menos para evadir impuestos, es una vileza el que los empresarios propaguen rumores entre sus empleados de que por la presencia en el municipio del Sindicato del Cemento, integrado por camioneros dedicados al acarreo de materiales de construcción de obras, estén evaluando "cerrar las minas" , que sería lo mismo a "matar a la gallina de los huevos de oro".
Lo único cierto es que estos miserables explotadores se quieren "agarrar" de un pretexto para hacer lo que siempre han hecho: correr a los trabajadores antes de que tengan una antigüedad laboral y cambiar la razón social de las mineras para hacerlas pasar como nuevas y así evitar demandas de tipo laboral y de otro género.
El miércoles, producto de los abusos de estas mismas empresas hacia el Ejido de San Pedro, integrado además por las localidades de Garabatos y Llanitos, cuyos habitantes fueron despojados de terrenos usados por esas mineras para ampliar los carriles del camino por donde pasan los camiones de carga que transportan el metal extraído de las minas sin siquiera haberles pedido permiso a sus dueños ni mucho menos pagarles un quinto de indemnización, a modo de protesta los ejidatarios junto con los camioneros del Sindicato del Cemento bloquearon por varias horas los accesos de las minas Carrizal Manning, Sago y Guadalupe en demanda del pago de los daños a los predios
El bloqueo terminó por la noche de ese mismo día, luego de que le dieron 3 días de plazo al inepto alcalde de Zimapán, Hermilo Trejo (títere de Willy Trejo, alias El Violinista o el Duende Maldito) para que mediara el problema ante las mineras, bajo la advertencia de que iban a volver a bloquear a esas minas si no había solución a sus demandas.
Los gerentes de las compañías mineras para no pagar las indemnizaciones al Ejido de San Pedro, y a las comunidades de garabatos y Llanitos así como para justificar los despidos para evitar antigüedad de sus empleados, decidieron de manera unilateral mantenerlas cerradas junto con otras tres minas de otras empresas, el jueves y viernes.
Esto con el claro fin de provocar el enojo de sus trabajadores, así como de los sindicatos o agrupaciones de transportistas de metales y material petreo al servicio de las minas y así orillarlos hacer la marcha hacia el Palacio de Gobierno de Hidalgo.
Por cierto, el contingente nunca llegó a la ciudad de Pachuca sino se quedó varado cerca del municipio de Tlaxiaca. Es obvio que los organizadores de la marcha recibieron instrucciones de los dueños y administradores de las minas a que no "le causaran desmadre" al gobernador, y permitieran- como ocurrió- que una comitiva encabezada por Hermilo Trejo, y supuestos representantes de los mineros y las agrupaciones de transportistas pudieran llegar a Plaza Juárez, y sostener una reunión en el cuarto piso del Palacio de Gobierno con Guillermo Olivares, titular de Gobernación estatal.
En la reunión donde Hermilo Trejo,las mineras, y los transportistas que trabajan para los empresarios mineros así como la llamada línea verde de transporte público de Zimapán llegaron a supuestos acuerdos.
Sin embargo, Guillermo Olivares quién insiste en hacer mesas de negociación con representantes de cooperativa Cruz Azul con los delincuentes que tienen tomada de manera ilegal la planta de Jasso, Tula en búsqueda de un supuesto acuerdo, en el asunto de Zimapán no convocó a la reunión a los representantes del Sindicato de Cemento ni los ejidatarios de San Pedro, ni de las localidades de Garabatos y Llanitos.
Por cierto, Guillermo Olivares no fue invitado a la reunión que el gobernador Julio Menchaca sostuvo con Rosa Isela Rodríguez, secretaria de gobernación federal que se celebró el mismo viernes en el Tuzoforum, de la ciudad de Pachuca.
Tampoco salió a los medios de comunicación hacer declaraciones estruendosas sobre el conflicto que provocaron sus consentidos Hermilo Trejo y Alhely Medina. Ahora fue cauto como debió de haberlo sido desde el inicio del gobierno de Julio Menchaca.
Con el conflicto que se generó en Zimapán, quedó clara la ineptitud del alcalde Hermilo Trejo, quién fue exhibido tanto por los integrantes de Sindicato de Cemento como por los empresarios mineros.
Pero lo cierto es que Hermilo, la diputada Alhely Medina y el encargado de gobernación Estatal de la región, Manuel Rivera Pabello son títeres del Willy Trejo Leal, conocido también como el "Violinista" o "el Duende Maldito".
Se dice en Zimapán que este individuo (que fue denunciado penalmente por sus dos hermanas de haber presuntamente ultrajado sexualmente a sus dos pequeñas sobrinas de 8 y 9 años de edad, asunto en el que está involucrada también su cuñada Alhely Medina), presume tener protección de Guillermo Olivares quien según Willy,a su petición , ordenó al nefasto Marco Rico Mercado, dirigente estatal de Morena el imponer a Hermilo Trejo como candidato a la alcaldía de Zimapán sin tomar en cuenta el acuerdo de unidad pactado entre todos los liderazgos de ese municipio.
Otra de las imposiciones fue el de Alhely Medina, que ni siquiera es originaria ni de Zimapán ni de la región de la Sierra Gorda y que ayudada por el inepto Abraham Mendoza Zenteno, obtuvo la candidatura bajo el argumento de ser indígena por una carta que le dio un delegado de una comunidad por petición de una mujer identificada con el dizque súper delegado de programas sociales del gobierno federal.
Obviamente tanto Hermilo Trejo como Alhely Medina tienen órdenes directas de Willy Trejo de estar al servicio de las empresas mineras y de ayudarlos a combatir a quienes denuncien sus abusos.
Es por eso que desde que asumieron sus cargos tanto Hermilo Trejo como Alhely Medina, han guardado silencio de la terrible contaminación que originan los jales mineros arrojados a las comunidades como la de San Miguel así como de ríos y devastación de zonas boscosas.
Ambos tienen esos cargos, no por ellos sino por el efecto de la popularidad de la hoy presidenta Claudia Sheinbaum y del expresidente Andrés Manuel López Obrador, y aunque se vistan con chalecos guinda, tanto Hermilo Trejo como Alhely Medina no encajan en lo que dice uno de los principales preceptos de Morena de "primero los pobres"; esos dos están al servicio de los ricos empresarios explotadores de Zimapán.