Sheinbaum respalda a Ochoa con proyecto de economía circular en Tula



Jorge Montejo

En Hidalgo, parece que el gobierno estatal ha encontrado un nuevo pasatiempo: discriminar a sus adversarios políticos, a la izquierda, y de paso, hacerle la vida imposible a Cuauhtémoc Ochoa, el senador de Morena y el Partido Verde por Hidalgo, porque no hay nada más divertido que ver a un político luchando contra viento y marea, ¿verdad?

Pero lo que el gobierno de Hidalgo no anticipó es que Ochoa tiene una aliada poderosa en Claudia Sheinbaum, quien el día de su toma de protesta anunció un proyecto de economía circular en Tula, impulsado nada menos que por nuestro querido senador. 

Sheinbaum, en su primer mensaje como presidenta de México, prometió seguir los avances de la administración anterior y, al mismo tiempo, implementar su propia visión para el desarrollo del país. Y vaya visión, destacando Tula, una de las ciudades más contaminadas del país, con la promesa de convertirla en la ciudad más limpia. Claro, porque limpiar la polución industrial es más fácil que limpiar décadas de corrupción priista.

La calidad del aire en Tula ha sido un problema crónico, con enfermedades respiratorias y cáncer rampantes entre sus habitantes, pero Sheinbaum propondrá una planta termosolar que transformará un terreno destinado a una refinería que nunca se construyó de Calderón. Porque si algo sabemos hacer bien en México, es planear grandes proyectos que terminan en terrenos baldíos.

Sheinbaum aseguró que su administración construirá en Tula el proyecto de economía circular más ambicioso del mundo. ¡Imaginen la audacia! ¿Quién necesita pequeñas metas cuando puedes prometer el mundo? Y por si fuera poco, también se generarán empleos y se mejorará la calidad de vida de la región. ¡Vaya golpe maestro!

Y mientras tanto, el grupo político de Menchaca se revuelca en su aversión hacia Ochoa y sus aliados. Porque, claro, nada une más que un enemigo común. Pero, ¿quién puede culparlos? La política es, después de todo, un juego sucio, y Menchaca tiene su propio equipo que proteger, compuesto por figuras como Ricardo Monreal, Marcelo Ebrard y Mario Delgado.

En medio de este circo político, no podemos olvidar al gran Osorio Chong, una figura que nunca se ha ido, debe sentirse devastado al ver cómo sus antiguos seguidores del PRI lo traicionan por la 4T. Nuvia, antes casi su confidente, ahora busca la gubernatura por el Partido Verde por un periodo de dos años, mientras que Ochoa apunta a la gubernatura en 2030 por los seis años. Porque en la política, siempre hay un plan B, C y hasta D. 

Así, mientras el gobierno de Menchaca sigue su cruzada para complicarle la vida a Ochoa, nosotros observamos, entretenidos, el drama que se desarrolla. Porque si hay algo que la política de Hidalgo nos ha enseñado, es que siempre hay espacio para más traiciones. ¡Que siga el espectáculo!