Alonso Quijano
El sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador finalizará con un logro económico notable: la estabilidad del peso mexicano frente al dólar, algo que no ocurría desde la presidencia de Lázaro Cárdenas. Este hito contrasta marcadamente con los registros de sus predecesores, quienes enfrentaron significativas devaluaciones de la moneda nacional.
Durante el mandato de López Obrador, el peso ha mantenido su valor relativo frente al dólar, evitando la tendencia de devaluación que caracterizó a los gobiernos anteriores. Esta estabilidad económica destaca especialmente cuando se compara con las administraciones del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y del Partido Acción Nacional (PAN).
El expresidente Ernesto Zedillo, del PRI, vio una devaluación del 169% durante su sexenio, mientras que Enrique Peña Nieto, también del PRI, enfrentó una devaluación del 57%. En los sexenios panistas, Vicente Fox y Felipe Calderón no lograron mantener una estabilidad significativa, con devaluaciones del 16.7% y 17.5% respectivamente.
La administración de Miguel de la Madrid, también del PRI, es recordada por la monumental devaluación del 1442.9%, un récord afortunadamente no superado desde entonces.
El manejo de la política económica durante el sexenio de López Obrador ha sido clave para evitar la devaluación del peso. Medidas fiscales, control de la inflación y políticas monetarias prudentes han contribuido a este logro, brindando estabilidad en un contexto global de incertidumbre económica.
Este hito representa una victoria significativa para la administración saliente, destacando la importancia de una gestión económica responsable y prudente en la preservación del valor de la moneda nacional, y marca un precedente importante para los futuros gobiernos de México.
