Sanación.


Andrea Jassán 

Hemos hablado en artículos anteriores de lo que sucede a las víctimas, cómo actúan los generadores de violencia, cómo reacciona el círculo de amigos en común, tus amigos y familiares, así como de estadísticas.  Ahora toca hablar de las mujeres violentadas y sobre vivientes.

Los "hombres" con rasgos narcisistas, tóxicos, misóginos, machistas entre otros, que ejercen cualquier tipo de violencia contra la mujer, seleccionan a sus víctimas, no es casualidad.

¿Qué es lo que buscan de una mujer?

Mujeres inteligentes, empáticas, compasivas, exitosas, alegres, carismáticas, con relaciones, trabajadoras, luchonas, con calidad humana, o cualquier otra cualidad que ellos admiren o que carezcan de ella.

Cuando eres víctima de violencia o abuso terminas devastada y estás cualidades escondidas o creyendo que no las tienes.  La autoestima en el piso, con ansiedad, depresión, trauma, ataques de pánico, disociada, aislada, sobajada, sin energía, con problemas de salud y físicos, niebla mental, pérdida de concentración, dificultad para realizar labores básicas, cansancio extremo, entre otros.

Eres o fuiste víctima, no te hagas la víctima y conviértete en sobreviviente haciéndote responsable de tu sanación.

Y podrás decir y ¿Cómo? 

Pues tomando el control de tí misma y de tu vida.

Quiero que sepas que todos, todos, todos los seres humanos tenemos traumas de la infancia, carencias, apegos, lealtades, creencias y expectativas.  Así es que tú no tienes la culpa que alguien haya decidido violentarte ni abusar de ti. Sí así fuera entonces todas las personas serían víctimas y no es así, hay personas con baja autoestima, con traumas infantiles etc, que tienen buenas relaciones de pareja.  

Ya con esto en mente es muy importante que tomes manos a la obra y decidas sanar.  Nadie lo va a hacer por tí, no va a venir ningún principe azul a rescatarte.  Eso depende completamente de tí y es tu responsabilidad.  Si decides quedarte estática entonces sí, te estarás haciendo la víctima y entonces tu violentador habrá ganado.

Es importante destacar que estarás viviendo un duelo por la pérdida de una relación, el cual es completamente normal, con las distintas etapas de la cual se conforma el mismo ( ). Estás viviendo otro duelo de la ilusión de una persona que no es real, de un futuro que te prometió y nunca iba a existir. Y por último, como si fuera poco lo anterior, el trabajo personal para recuperar y sanar tu salud física, emocional y mental.

Por todo lo anterior, el tiempo y el proceso de duelo y sanación no es normal ni bajo ningún estándar, cada persona irá marcando su propio ritmo.

Parte fundamental de tu sanación es conseguir un buen terapeúta que esté especializado en el tema de abuso y violencia. Esto con el fin de poder sanar todas las secuelas que deja el abuso y violencia, así como, entender y reconocer el porque te vinculaste con una "persona" con estás características para sanar de raíz y que puedas tener una vida en paz y sin violencia.

En el proceso de desvinculación y sanación es imperativo que hagas contacto cero ( siempre y cuando no tengas hijos o algún vínculo que sea imposible romper, de ser así mantén el mínimo contacto) tanto con el generador de violencia cómo con todas las personas que te puedan traer noticias, mensajes, o estén convencidos que la víctima es él. 

Se compasiva contigo misma, trabaja en perdonarte y no te culpes por lo sucedido, no te castigues o flajeles por no irte antes, por permitir tanto, la violencia y abusos a los que te viste sometida, no son tu culpa.  Acércate a grupos de apoyo con personas víctimas de abuso y violencia. Busca a tus familiares,  verdaderos amigos y recupera a las personas que te alejaste durante la relación. 

Recuerda como eras antes de la relación, contacta con todas esas cualidades, valores, actividades, y éxitos que sí son tuyos y que tanto tu "pareja" criticaba o menospreciaba o violentada o usaba en tu contra.

Haz las actividades que te gustan, leer, escribir, bailar, cantar, sonreír, arreglarte, salir sin que nadie te controle, cambia de peinado, realiza cosas diferentes, atrevete a soñar de nuevo, prueba nuevas rutinas, mírate al espejo todos los días y dí en voz alta tus cualidades y lo bonita que eres.

Sana tus heridas de infancia, carencias, apegos,  lealtades, traumas, etcétera. Una vez que sanes está parte, verás y entenderás por qué te involucraste con esta "persona".

No te hagas la víctima, lo que te sucedió es horrible y ningún ser humano debería pasar por lo que tú pasaste, y además todavía te quedó fuerza para salir huyendo, pero no se vale que utilices eso de justificación para seguir perdiendo años de tu vida quejándote de lo que te pasó.  Eres altamente resiliente y mucho más fuerte de lo que crees. Manos a la obra, tienes un nuevo libro por escribir en tu vida. Fíjate bien que dije libro y no capítulo.  Así puedes, con la sabiduria adquirida, crear una historia completamente diferente sin tener que ligar un capítulo al siguiente.

No eres culpable de la violencia y abusos pero sí eres 100 % responsable de tu sanación y recuperación.

Si quieres contar tu historia puedes contactarme en mis redes sociales o bien puedes buscar ayuda de un terapéuta que tenga experiencia en el tema.  Juntos podemos Sanar Alas.

Tienes derecho a una vida en paz y sin violencia.