Julio Gálvez
La Sociedad Real Zumate, que presentó un amparo por la falta de indemnización de sus tierras afectadas por la construcción de la carretera Pachuca-Huejutla en el tramo Real del Monte-Huasca, tuvo un acercamiento con Claudia Sheinbaum. Le entregaron en sus manos una carta explicando la problemática relacionada con la suspensión de la construcción de la carretera y señalando cómo el gobierno de Hidalgo protege a políticos corruptos.
La Rancheria de Pueblo Nuevo cuenta con un decreto presidencial emitido en 1924, que les otorgó alrededor de 900 hectáreas de tierras privadas para su desarrollo, pero bajo el régimen comunal con el único objetivo de defender la tierra ante tribunales y autoridades. Este régimen establece que las tierras comunales son inalienables, imprescriptibles e inembargables, protegiendo así el patrimonio de la ranchería de Pueblo Nuevo.
Con la construcción de la carretera Pachuca-Huejutla, el gobierno del exgobernador Omar Fayad solicitó en dos ocasiones recursos federales para el pago de las afectaciones generadas por la construcción de la carretera. Sin embargo, los pagos fueron realizados a personas que acreditaron la propiedad de las tierras con escrituras basadas en jurisdicciones voluntarias, es decir, títulos supletorios de propiedad que carecen de validez en este contexto. Este es el caso en Real del Monte-Huasca, donde Pueblo Nuevo interpuso un amparo por la falta de indemnización por la afectación de sus tierras.
El gobierno de Hidalgo ha permitido durante décadas la invasión de terrenos por parte de políticos acaudalados, como Francisco Olvera, entre muchos otros, en Pueblo Nuevo y Emilio Lozoya en Huasca, quienes han construido cabañas en tierras comunales robadas del predio Bosques de Pueblo Nuevo, propiedad legítima de los comuneros. Estos actos de corrupción y usurpación de tierras han generado un profundo malestar entre los habitantes de Pueblo Nuevo, quienes ven cómo su patrimonio es vulnerado sin recibir el respaldo legal y justo que merecen.
La intervención de Claudia Sheinbaum, quien recibió en sus propias manos la tarjeta informativa de los comuneros, representa una esperanza para la comunidad de Pueblo Nuevo de que sus demandas sean escuchadas y atendidas. La lucha por la indemnización justa y el respeto a la propiedad comunal continúa, en un esfuerzo por preservar el legado y el sustento de generaciones de habitantes de esta región.
