María Gil
En un hecho sin precedentes, el Gobierno de España ha expresado su profunda indignación por la exclusión del rey Felipe VI de la lista de invitados para la toma de posesión de Claudia Sheinbaum como presidenta de México. A través de un comunicado emitido por el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, el gobierno español ha anunciado que no enviará a ningún representante a la ceremonia.
"El Gobierno de España considera inaceptable la exclusión de S.M. el Rey de la invitación a la toma de posesión de la presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum Pardo, el próximo 1 de octubre en Ciudad de México," señala el comunicado. "Por este motivo, el Gobierno de España ha decidido no participar en dicha toma de posesión a ningún nivel."
El gobierno mexicano, encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, envió la invitación oficial al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y no al rey Felipe VI, jefe de Estado de España. Esta decisión ha generado malestar en Madrid, ya que consideran que la ausencia de una invitación al monarca es una ofensa diplomática.
La relación entre España y México ha sido tensa desde que López Obrador asumió la presidencia en 2018. El presidente mexicano ha insistido repetidamente en que España debe pedir disculpas por los abusos cometidos durante la Conquista. En 2019, López Obrador envió una carta al rey Felipe VI solicitando una disculpa formal, petición que fue rechazada por la corona española.
La presidenta electa, Claudia Sheinbaum, también ha expresado su postura sobre este tema. En julio, Sheinbaum declaró que "debe haber un perdón por parte de España" por la "conquista española" que, según ella, dejó "muchas masacres y violencia". Sin embargo, Sheinbaum ha manifestado su deseo de mantener relaciones cordiales con España, a pesar de sus declaraciones sobre la necesidad de una disculpa.
"Estoy de acuerdo en que debe haber un perdón por parte de España. Lo he dicho en varias ocasiones, no es la primera vez que lo digo. Lo hizo ya el papa Francisco," afirmó Sheinbaum en una conferencia de prensa. No obstante, subrayó la importancia de mantener las relaciones bilaterales y seguir insistiendo en la disculpa. "Porque la conquista española tuvo muchas masacres y mucha violencia, por eso el presidente le llama 'la invasión de España'. Nada más hay que pensar en la masacre de Cholula o en la del Templo Mayor," añadió.
La decisión del gobierno español de no enviar a ningún representante podría interpretarse como una señal de enfriamiento en las relaciones bilaterales.
A medida que Claudia Sheinbaum asuma la presidencia, será crucial observar cómo se desarrollan estas dinámicas y si habrá algún esfuerzo por parte de ambos gobiernos para reparar las tensiones actuales; sin embargo, México continúa esperando una disculpa.
