Durante la salida del sol, se observó un halo solar excepcionalmente raro, un fenómeno óptico que ocurre cuando la luz solar se refracta en cristales de hielo en la atmósfera superior.
Este halo, poco común, destaca por sus colores vibrantes y su forma distintiva, proporcionando una vista impresionante y fugaz de los efectos atmosféricos sobre la luz solar.
