María Gil.
Ayer, en una conferencia de prensa en Hidalgo, que se convirtió en un espectáculo de titubeos y evasivas, las senadoras de Morena, incluyendo a la destacada senadora María Merced González, intentaron -con poco éxito- explicar los pros y contras de la reforma judicial que actualmente se discute en el Senado.
Las legisladoras, en su esfuerzo por abordar la reforma, lograron articular que "la justicia es lenta". Y hasta ahí llegó la claridad. Sobre el crucial tema del voto popular para la elección de ministros, su postura fue un misterioso enigma envuelto en un secreto. ¿Campañas políticas para la elección de juzgados? Ni una palabra. Tal vez estaban guardando esas perlas de sabiduría para otra ocasión.
Al parecer, el público no merecía saber las opiniones de las senadoras sobre la posibilidad de que el dinero del crimen organizado y la política influya en las campañas judiciales. Porque, ¿quién necesita saber sobre la potencial politización del sistema judicial mexicano? Evidentemente, no era el día para discutir cómo podríamos estar a punto de ver a los jueces más preocupados por sus campañas que por impartir justicia.
La habilidad de las senadoras para evitar temas cruciales podría considerarse casi mágica. Lograron evadir cualquier conversación significativa sobre los riesgos que conlleva la reforma judicial. Por ejemplo, cómo la introducción de campañas políticas para la elección de jueces podría abrir las puertas a la intervención de dinero ilícito. Pero, ¿por qué preocuparse por detalles tan nimios cuando se puede repetir que "la justicia es lenta"?
En resumen, la conferencia de prensa fue un recordatorio de la maestría política en su máxima expresión: mucho hablar, pero decir poco. Las senadoras de Morena dejaron claro que, aunque la justicia es lenta, sus respuestas y explicaciones pueden ser aún más lentas y vagas. Al menos, el público puede tener la tranquilidad de saber que las reformas cruciales de nuestro sistema judicial están en manos de expertos en el arte de la evasión.
Quizás en el próximo foro, las senadoras de Morena nos iluminen con sus opiniones sobre los temas que realmente importan. Hasta entonces, seguiremos esperando, con la misma paciencia con la que esperamos justicia.
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