María Gil.
La magistrada Nadia Villanueva Vázquez, conocida por sus recientes acusaciones de corrupción contra los familiares del Presidente Andrés Manuel López Obrador, enfrenta ahora el escrutinio público por su decisión de liberar en 2015 a Rubén Oseguera González, alias "El Menchito", hijo del líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
El pasado fin de semana, durante su participación en el quinto foro de los “Diálogos Nacionales sobre la Reforma al Poder Judicial”, la magistrada Villanueva se lanzó contra el Presidente López Obrador, afirmando sin pruebas concretas que, aunque hay corrupción en el Poder Judicial, ningún otro poder está exento de este mal, incluyendo a los familiares de AMLO.
La respuesta no tardó en llegar. El Diputado Gerardo Fernández Noroña la emplazó a denunciar formalmente o a pedir una disculpa pública por sus acusaciones. Sin embargo, fue después del foro que salió a la luz el polémico pasado de la magistrada.
Según reportaron medios como Excélsior, El Financiero y SinEmbargo, en 2015, la magistrada Villanueva liberó a Rubén Oseguera González, alias "El Menchito", detenido en Zapopan, Jalisco. "El Menchito" es el segundo al mando del CJNG y actualmente está preso en Estados Unidos, acusado de narcotráfico y crimen organizado.
Villanueva justificó la liberación de "El Menchito" argumentando que la entonces Procuraduría General de la República (PGR) no aportó suficientes elementos para probar los presuntos crímenes y que hubo violaciones al debido proceso.
Pero la controversia no termina ahí. Se acusa a la magistrada de haber desplazado a trabajadores del Juzgado Segundo de Distrito en Tlaxcala para asignar esos puestos a personas de su confianza, ofreciéndoles mejores espacios y salarios.
Este caso subraya la complejidad y las tensiones dentro del sistema judicial mexicano, y plantea preguntas sobre la integridad y las motivaciones de los funcionarios que deberían estar al servicio de la justicia.