Ricardo Montoya
Tras ser golpeado y pateado por dos compañeros de su salón de clases, identificados como Iker y Amadeo quienes le ocasionaron un traumatismo craneoencefálico y le fracturaron una clavícula, pasadas las 21 horas de la noche del martes falleció el niño Adriel Moreno Mejía de once años de edad tras cinco días de dolorosa agonía en el Hospital General de Actopan.
Horas antes de su fallecimiento, los médicos le habían diagnosticado muerte cerebral.
"Mi pequeño, mi hijito acaba de fallecer hace diez minutos", dijo sollozando y con el rostro cubierto de lágrimas su padre, Obed Moreno Salvador tras comentar que su hijo al momento de ser agredido cursaba el sexto año de primaria.
Pese al enorme dolor, el señor Obed relató en entrevista minutos después de haberse enterado de la muerte de su hijo, que el pasado jueves 7 de marzo,entre las 9.40 y diez de la mañana, Rufino Jiménez Reyes director de la escuela primaria Benito Juárez de la localidad de El Xitzo del municipio de Santiago de Anaya, llegó en un auto a su casa con el pequeño Adriel.
"Me lo trajo a la casa en un estado bastante mal. El director me dijo que lo habían tirado".
El niño, aún consciente, llorando y quejándose del dolor le dijo a su padre que dos de sus compañeros ambos también de once años de edad, lo habían golpeado y pateado.
Le preguntó entonces al director que había ocurrido , a lo que, nervioso y con evasivas le contestó: "Ahi te lo dejo, sacale una placa de su bracito. Ya lo chequé y solo tiene un problema en el brazo. No tiene más. Ahi si pasa algo me avisas"
"Y hasta la fecha (12 de marzo) , ni él ni la maestra que le daba clases Flor Isela Percastegui Moctezuma nunca vinieron al hospital para preguntar como estaba mi hijo".
Las placas que le sacaron al niño en el nosocomio revelaron que le habían fracturado una clavícula, y tenía un derrame en el estómago y un traumatismo craneoencefálico.
Entonces lo llevaron de urgencia al Hospital General de Pachuca, pero allí le dijeron a Obed y a su esposa Reina Mejía que ya no lo podían operar, ya que tenía un derrame de sangre en el cerebro del 95 por ciento.
Ante éste cuadro clínico regresaron al menor de edad al nosocomio de Actopan, donde los médicos de plano le informaron que por la magnitud de las lesiones, los golpes que recibió fueron bastantes fuertes por lo que existe la sospecha de que posiblemente también fue golpeado por un adulto.
"Ya los médicos no nos dieron esperanza de que fuera a sobrevivir", dijo.
Según Obed, los padres y madres de otros alumnos de la escuela le relataron que sus hijos también habían sido víctimas de agresiones y abusos por parte de Iker y Amadeo.
"Esos niños ya han hecho muchas cosas y el director no hace nada. Él ha dicho en muchas ocasiones que sólo le importa la política, no la escuela".
De como y donde ocurrió la agresión, Obed dijo que se suscitó dentro del aula en horario de clase.
"No se que estaba haciendo la maestra Flor Isela, ya que fue durante su ausencia del salón en que golpearon y patearon a mi hijo"
Algunos de los compañeros de Adriel vieron que Iker y Amadeo lo aventaron y tiraron al piso del salón; lo golpearon y patearon en el lado izquierdo de la cabeza.
También que de manera brusca el director lo levantó del suelo y lo aventó en el interior de su coche.
Pero no era la primera vez que Adriel sufría del maltrato de Iker y Amadeo, ya que en varias ocasiones le robaron el dinero que su papá le daba como mesada.
A pesar de esto, el director del plantel no hizo nada para sancionar a los niños agresores.
Obed dijo que incluso Rufino Jiménez "tuvo el descaro de suspender clases y ordenar a los alumnos no decir nada del caso".
Por lo pronto, la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo inició la Carpeta de Investigación por el asesinato de Adriel.
"¡Exijo justicia para mi hijo!¡ Que los niños asesinos, el director y la maestra paguen por su crimen!",es el clamor tanto de Obed como de su esposa Reina Mejía.
De acuerdo a vecinos del Xitzo, tanto Rufino Jiménez como Flor Isela huyeron de la localidad en cuanto se enteraron de la muerte del niño.
