Desentrañando las Relaciones Mediáticas en Hidalgo.



Julio Gálvez.

En el complejo escenario político de Hidalgo, el fenómeno del gatopardismo ha dejado una marcada huella en la relación entre el gobierno y los medios de comunicación. A pesar del cambio de administración y la llegada de un nuevo gobierno, emerge una extraña continuidad en las alianzas mediáticas.

Los principales medios que, en el pasado, respaldaban fervientemente al Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Hidalgo y solían expresar críticas hacia Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y Morena, han experimentado un giro sorprendente en su discurso, elogiando ahora la gestión del gobierno actual.

Este cambio, en apariencia radical, plantea preguntas fundamentales sobre la independencia de los medios y sus verdaderas intenciones detrás de esta nueva postura 💸.

El gatopardismo, término inspirado en la novela "El Gatopardo" de Giuseppe Tomasi di Lampedusa, describe la práctica política de simular cambios significativos para preservar el statu quo. En Hidalgo, este fenómeno se manifiesta en la aparente transformación de la relación entre el gobierno y los medios de comunicación, ya que a pesar del cambio en el poder, la continuidad en las alianzas con los mismos medios que apoyaban al PRI y desacreditaban a AMLO sugiere que, en realidad, poco ha cambiado.

Durante los 94 años de gobierno del PRI, varios medios de comunicación estuvieron estrechamente vinculados a ese partido para imponer la información oficial en la opinión pública y frecuentemente cuestionaron y criticaron a AMLO y su movimiento. Ejemplos notables son El Sol del empresario priista Mario Vazquez Raña, Criterio mejor conocido como Priterio, Quadratin y La Silla Rota de Roberto Rock, este último convertido ahora en el medio oficial de la coordinación de comunicación social de Hidalgo para elogiar la gestión gubernamental hidalguense. La práctica anterior se extiende en las versiones hidalguenses de medios nacionales, actuando como "chayoteros", término usado por AMLO para describir a los periodistas que reciben pagos gubernamentales.

En este contexto, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), ha generado controversia al hacer pública una lista de periodistas, denominados "chayoteros", que presuntamente recibieron pagos durante el gobierno de Enrique Peña Nieto. Entre los mencionados se encuentra Roberto Rock, editor en jefe de "La Silla Rota". No obstante, el gobierno morenista de Hidalgo guarda una estrecha relación con esta empresa, como evidencian imágenes en redes sociales donde aparece el coordinador de comunicación social, Eduardo Iturbe.

Esta fotografía ha levantado interrogantes sobre la conexión del periodista con la nueva administración y si persisten las prácticas del pasado en materia de comunicación social, subrayando la necesidad de un cambio en esta área.

AMLO ha reiterado en varias ocasiones su postura en contra del pago a periodistas por parte del gobierno con el objetivo de influir en la cobertura mediática, destacando que erradicar esta práctica es esencial para lograr una prensa libre y objetiva. No obstante, la divulgación de esta lista también ha suscitado inquietudes sobre la transparencia gubernamental y la posible utilización política de la información.

La justificación del presidente para hacer pública esta lista radica en su compromiso con la transparencia y la rendición de cuentas ante el pueblo mexicano, insistiendo en que no busca perseguir ni censurar a los periodistas mencionados, sino evidenciar prácticas perjudiciales para el periodismo independiente y la democracia. AMLO ha enfatizado que la lista se ha obtenido mediante investigaciones exhaustivas con el propósito de erradicar la corrupción en el país.

El cambio abrupto en el enfoque de los principales medios suscita sospechas sobre su independencia editorial. ¿Qué motivó esta transformación tan repentina en su postura hacia el gobierno? ¿Es una convicción genuina o más bien una estrategia para mantener el favor del poder político?

Estas preguntas subrayan la necesidad de analizar si los medios cumplen con su deber de informar de manera objetiva y equitativa, o si ceden a intereses partidistas o económicos. Un auténtico periodista debe estar alejado del poder y cercano al pueblo.

En este contexto, es crucial reflexionar sobre el papel de los dueños de los medios de comunicación, quienes actúan motivados por intereses políticos, económicos o ideológicos. Esta realidad puede propiciar la manipulación de la información y la promoción de agendas particulares en lugar de proporcionar una cobertura imparcial y objetiva.

Por otro lado, los periodistas y ciudadanos con sus propios medios de comunicación suelen actuar en defensa del derecho humano fundamental a la libertad de expresión. Estos medios independientes se esfuerzan por ofrecer una cobertura veraz y transparente, buscando empoderar a la sociedad a través de la información, permitiendo que diversas voces sean escuchadas y contribuyan al debate democrático.

El gatopardismo en Hidalgo ha dejado su impronta en la relación del gobierno con los medios de comunicación. A pesar del cambio de administración, se percibe una continuidad encubierta en las alianzas mediáticas. Los medios que anteriormente respaldaban al PRI y criticaban al gobierno de AMLO ahora se han convertido en repetidoras del gobierno de Menchaca. Este cambio plantea interrogantes sobre la independencia de los medios y sus verdaderas intenciones económicas detrás de esta nueva postura.

Resulta esencial que los ciudadanos sean conscientes de estos fenómenos y exijan una cobertura mediática imparcial y comprometida con la verdad. Solo así el periodismo puede cumplir efectivamente su papel como el cuarto poder, actuando como garante de una sociedad informada y democrática. De lo contrario, un medio o periodista que se venda jamás podrá ejercer plenamente el poder que le corresponde.

_________
Pd. La crítica se hace a nivel de dueño de medio de comunicación, no como el de ellos, sino uno que sirve al pueblo.