El hoy magistrado Víctor Juárez González pretendió bajar de 50 a 18 años de cárcel a Gregorio Wenceslao Peña quien violó a su hija en tres ocasiones.
Ricardo Montoya
Víctor Juárez González, actual magistrado del Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE) de Hidalgo, el mismo que en junio pasado decidió ratificar la no vinculación de alias Willy Trejo señalado por sus dos sobrinas de 5 y 9 años de edad de haberlas ultrajado junto con otras cuatro personas, en el municipio de Zimapán entre ellas su cuñada Alhely "N", en 2012 intentó reducir la condena de 50 a 18 años de cárcel de Gregorio Wenceslao Peña quien violó a su hija en tres ocasiones.
En aquella ocasión María Guadalupe Pérez, y su hija violada fueron objeto de todo tipo de amenazas y agresiones por parte de algunos de los pobladores de la localidad de Botenguedo, municipio de Ixmiquilpan de donde Gregorio Wenceslao era uno de los caciques, inmensamente rico, dueño de grandes extensiones de tierra y de cuentas bancarias.
Cuando en 2008 la niña, en ese entonces de 12 años de edad confío a su madre que su padre la acababa de violar por tercera ocasión, María Guadalupe de inmediato denunció el hecho ante la Procuraduría de Hidalgo. Eso provocó que los familiares y amigos de Wenceslao , todos ellos ricos terratenientes de Botenguedo arremetieran contra María Guadalupe y sus dos hijos , a tal grado de que las expulsaron del pueblo por lo que ambas mujeres y un niño menor de edad tuvieron que colocar una carpa frente a la alcaldía de Ixmiquilpan para no ser agredidas.
El entonces alcalde priista Heriberto Lugo, el mismo que años antes expulsó a evangélicos de su localidad, no hizo nada por ayudarla.
Con muchas dificultades, María Guadalupe logró que Wenceslao fuera detenido en 2009 y sometido a juicio. En base a los señalamientos de la víctima y la confesión de los delitos que hizo en forma prepotente y altanera Wenceslao, el entonces juez de Ixmiquilpan Víctor Juárez González lo condenó a 50 años de cárcel.
Esto pese a que la condena, según el Código Penal de Hidalgo era de más de 18 años de cárcel por cada uno de los ultrajes.
De forma inexplicable, en 2012, Juárez González intentó anular la condena que el mismo había dictado tres años antes de dos de los tres ultrajes, para reducir de 50 a 18 años la estadía de cárcel de Wenceslao, quien ya había purgado tres años por lo que sólo le restarían 15 años.
En aquel entonces, tal como lo declaró la madre de la víctima a este reportero y otros medios de comunicación , la intención del juez era en realidad soltar a Wenceslao en 2018, fecha en que se cumplía la media o mitad de condena.
De acuerdo a la ley, dependiendo del comportamiento de los reos, pueden acceder a la libertad condicional al cumplír la mitad de su condena.
Para anular su culpabilidad en dos de las tres violaciones, de forma inexplicables Víctor Juárez dio por valida una controversial prueba médica relacionada a que no era posible que el individuo hubiera ultrajado a su hija por el tamaño de su miembro sexual.
Pese a las manifestaciones de activistas, de familiares de la víctima e incluso de la niña que en aquel entonces ya tenía 15 años de edad, el juez a sangre fría, sin importarle que ponía en riesgo a la víctima y a otras niñas de ser violadas por el asqueroso sujeto , redujo la condena a Wenceslao de 50 a 18 años de cárcel.
María Guadalupe Pérez, con ayuda de abogados solidarios y de activistas, logró impugnar ante ante el Tribunal Superior de Justicia el dictamen de Víctor Juárez.
Al final, la segunda Sala Penal del Tribunal Superior de Justicia no solo desechó la resolución de Juárez González de disminuir la sentencia contra Gregorio Wenceslao a 18 años sino reajustó la inicial; es decir, aumentó de 50 a 55 años de cárcel la pena a Wenceslao, además de imponerle una multa de 500 días de salario vigente en ese entonces que era de 19 mil 150 pesos según la Toca Penal 896/2012, derivada de la causa penal 44/2009.
Cabe señalar que además de la niña que brutalmente ultrajó, Wenceslao procreó otro niño con María Guadalupe a los cuales se negó a pagar la manuntención pese a contar con grandes recursos económicos.
Se desconoce el porqué el juez intentó reducir la condena a Wenceslao. Se rumora que fue por corrupción. Por aquellos días trascendió que el individuo había vendido muchos terrenos para pagar "su defensa".
Este mismo juez, Víctor Juárez el pasado mes de junio ratificó la no vinculación de alias Willy Trejo tal como la jueza Janette Montiel lo había dictaminado en marzo de este mismo año sin tomar en cuenta los señalamientos de las niñas, los dictámenes médicos periciales realizados por médicos de la Fiscalía General de la República y otras pruebas.
En días recientes un juez federal tras puntualizar que la justicia federal protegía a las dos niñas violadas de Zimapán, le ordenó a Víctor Juárez volver a emitir otra resolución tomando en cuenta diversos elementos que de forma mañosa había omitido para justificar no vincular a proceso a alias Willy.
No obstante, corre el rumor de que el magistrado volverá incurrir en las malas prácticas en que recurrió en 2012.
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En 2012, pese a la aparente corrupción del juez Victor Juárez González, la madre de la niña violada en 3 ocasiones por su padre, logró evitar que el hoy magistrado le redujera la condena de 50 a 18 años de cárcel.
Familiares de las niñas violadas de Zimapán exigen orden de aprehensión contra Alhely "N", otra de las involucradas.
Se planean cierres de carreteras y protestas contra el magistrado, además de que se está preparando un caso en la Corte Interamericana de Derechos Humanos contra el Estado Mexicano, ya que en Hidalgo existen casos reiterados en donde las y los menores no son escuchados en el Poder Judicial.
