Cómo un clásico sabadazo calificó Andrés Manuel López Obrador, presidente de México la determinación del juez de Distrito Especializado en el Sistema Penal Acusatorio con sede en el Reclusorio Norte, José Rivas González, por haber otorgado la prisión domiciliaria al al exprocurador Jesús Murillo Karam, acusado por los delitos de tortura, desaparición forzada y contra la administración de la justicia en la desaparición de los 43 normalistas de la normal de Ayotzinapa.
Durante la mañanera, López Obrador señaló que el también exgobernador de Hidalgo, no pudo salir libre, porque hay otra causa, pero el juez argumentó a favor de la libertad del hidalguense.
Asimismo, el mandatario federal informó que está pidiendo la grabación de la audiencia porque, aseveró que este juez se dedicó a hablar mal de él y de asegurar que no cumplió con los familiares de los normalistas de Ayotzinapa.
