De acuerdo al último informe de sequía de la CONAGUA al 15 de octubre de 2023, en el Estado de Hidalgo, el 78% del territorio presenta un grado de sequía entre excepcional a severa, afectando a 66 municipios del estado. Se trata de 5 municipios en el nivel máximo de sequía excepcional, siendo Chapulhuacán, Jacala de Ledezma, La Misión, Pacula y Pisaflores. Destaca que ningún municipio del estado se ubica en condiciones normales hídricas y que Pachuca se sitúa en un grado de sequía moderada.
La población hace un llamado al gobierno del estado para dar soluciones integrales en cuanto a abasto y tratamiento de agua. Dado que cerca del 80% del agua dulce se consume en procesos agrícolas, ¿Qué medidas de eficiencia física está implementando Hidalgo para asegurar la viabilidad del agua hacia generaciones futuras?
La disputa por el agua es un asunto de gran relevancia en México, y en particular en Zimapán, Hidalgo, ha surgido una preocupación creciente. Se ha denunciado que agua proveniente de Zimapán está siendo transportada hacia Querétaro a través de tuberías instaladas desde este último estado. Esta acción plantea una cuestión fundamental: la violación de un derecho constitucional.
El acceso al agua es un derecho humano reconocido en la Constitución Mexicana, y su manejo debe ser cuidadosamente regulado para garantizar que sea utilizado de manera justa y sostenible. El hecho de que se esté trasladando agua desde un estado a otro sin la debida atención a las necesidades y derechos de la comunidad local es motivo de preocupación.
Además, la tolerancia de las autoridades y, en algunos casos, la presunta negociación por parte de presidentes municipales con el recurso hídrico, plantean cuestionamientos sobre la integridad y la transparencia en la gestión de este recurso vital.
Es fundamental que el gobierno de Hidalgo tome medidas adecuadas para abordar esta situación y asegurar que se respeten los derechos constitucionales de los hidalguenses. La gestión del agua debe basarse en principios de equidad, justicia y sostenibilidad, y cualquier violación de estos principios debe ser corregida de manera oportuna y efectiva.
El acceso al agua es un derecho humano reconocido en la Constitución Mexicana, y su manejo debe ser cuidadosamente regulado para garantizar que sea utilizado de manera justa y sostenible. El hecho de que se esté trasladando agua desde un estado a otro sin la debida atención a las necesidades y derechos de la comunidad local es motivo de preocupación.
Además, la tolerancia de las autoridades y, en algunos casos, la presunta negociación por parte de presidentes municipales con el recurso hídrico, plantean cuestionamientos sobre la integridad y la transparencia en la gestión de este recurso vital.
Es fundamental que el gobierno de Hidalgo tome medidas adecuadas para abordar esta situación y asegurar que se respeten los derechos constitucionales de los hidalguenses. La gestión del agua debe basarse en principios de equidad, justicia y sostenibilidad, y cualquier violación de estos principios debe ser corregida de manera oportuna y efectiva.
