Moody’s señaló que la baja recaudación de ingresos propios del Estado de Hidalgo ha sido uno de sus principales retos y se debe a la limitada base económica del estado, con un PIB per cápita equivalente al 60% del promedio nacional, lo que limita la flexibilidad del Estado y genera una alta dependencia a las transferencias federales.Hidalgo registró en 2022 un superávit de 3.4% de los ingresos totales, el más alto desde 2018 (positivo), pero este beneficio se atribuye al incremento en 2022 en las transferencias federales del Gobierno Federal (aportaciones y convenios), es decir, el soporte del Gobierno Federal del presidente López Obrador.
Para 2023, se vigilará que
el Estado realice inversiones importantes en la construcción de dos nuevas
presas para asegurar el suministro de agua potable en el largo plazo, poniendo
especial atención a cuestiones de sustentabilidad. Se planea fondear el gasto
de capital principalmente con las transferencias del Gobierno Federal y se
proyecta que Hidalgo reporte un déficit financiero de 1.7% de los ingresos
totales en 2023. En cuanto a la liquidez del
Estado de Hidalgo, ésta se evalúa en Moderada, donde es importante mencionar
que una porción del efectivo del estado quedó inmovilizado desde 2021 en el
Accendo Banco, institución financiera que fue intervenida y luego entró en
liquidación. De los $3,950 millones que el estado reportó en efectivo en
diciembre 2022, la cantidad inmovilizada ascendió a $809 millones. Si el estado
no logra recuperar los recursos, Moody’s estima que el ajuste contable a la
posición de efectivo resultaría en una disminución en la razón de liquidez a un
nivel apretado de 1.4x desde el 1.7x reportado en diciembre 2022. Y peor aún,
dado el déficit esperado en 2023, se espera que la razón de liquidez disminuya
a un nivel de 1.1x.
Con relación a los riesgos Ambientales, Sociales y de Gobernanza (ESG por sus siglas en inglés) destacó algunos puntos de relevancia para el Estado de Hidalgo: i) En cuanto a CAASIM y la infraestructura de agua, la calificadora destaca elevados índices de cobertura de agua potable (91.9%) y de eficiencia comercial (97.1%, son buenos para cobrar), sin embargo, la eficiencia física presenta áreas de oportunidad, ya que el indicador es de 49.6%. Es decir, del 100% del agua extraída del subsuelo únicamente llega a los consumidores un 49.6%, reflejo de la deteriorada situación de la infraestructura física de agua del Estado; ii) El principal reto ambiental que enfrenta el estado de Hidalgo está asociado a la calidad del aire dada su cercanía con la periferia del área metropolitana de la Ciudad de México, así como a la planta de generación termoeléctrica de Tula de la Comisión Federal de Electricidad, misma que utiliza combustóleo, gas natural o una mezcla de ambos; iii) el estado ha identificado que esta expuesto a riesgos relacionados con el cambio climático, entre ellos periodos de sequía que podrían afectar el suministro de agua y generar incendios; y iv) Según el Índice y Grado de Marginación del CONAPO, que aborda indicadores socioeconómicos desde acceso a educación básica hasta el acceso a la vivienda, el estado tiene un grado de marginación Alto.