¿Rock o corridos tumbados, qué es más complejo para la mente?



Por Julio Gálvez

El rock es un género musical que se caracteriza por su complejidad estructural. A diferencia de los corridos tumbados, que se basan en una estructura rítmica simple y repetitiva, el rock presenta una variedad de elementos que hacen de su estructura una obra de arte en sí misma.

En primer lugar, el rock utiliza una amplia gama de instrumentos, desde guitarras eléctricas y bajos hasta baterías y teclados. Cada uno de estos instrumentos desempeña un papel importante en la creación de la estructura musical del rock, lo que permite una gran variedad de sonidos y arreglos.

Además, el rock suele utilizar una variedad de técnicas de composición, como la alternancia entre estrofas y coros, la introducción de solos de guitarra y la utilización de cambios de tempo y de tonalidad. Estas técnicas permiten una gran variedad de expresiones musicales y una mayor complejidad estructural.

Por otro lado, los corridos tumbados, aunque también poseen una estructura musical, se basan en una repetición constante de la misma estructura rítmica y melodía. Esto hace que su estructura musical sea más simple y predecible que la del rock.

En conclusión, la complejidad estructural del rock se debe a la utilización de una amplia gama de instrumentos y técnicas de composición, lo que permite una gran variedad de expresiones musicales. Por otro lado, los corridos tumbados, aunque también son un género musical popular, se basan en una estructura más simple y repetitiva.