El Gobierno de Biden ha solicitado un mecanismo de consulta para resolver diferencias con México respecto al plan de eliminar el uso de maíz transgénico. Esta medida afectaría las exportaciones de Estados Unidos hacia el país. Las consultas se llevan a cabo bajo el Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá (T-MEC) y se relacionan con los planes de México de eliminar gradualmente el uso de maíz transgénico en alimentos para animales y productos destinados al consumo humano, entre otras medidas. El Gobierno de Estados Unidos ha expresado repetidamente su preocupación de que las políticas de México en materia de biotecnología no estén respaldadas por la ciencia y puedan interrumpir las exportaciones agrícolas hacia México. Por su parte, México ha afirmado que defenderá su posición en las consultas y demostrará con datos y evidencia que su política no afecta ni tiene un interés comercial para Estados Unidos. México sostiene que produce suficiente maíz para satisfacer su consumo interno y que esta medida fomenta la preservación de la producción con semillas nativas, en línea con el capítulo ambiental del acuerdo comercial. Además, asegura que estas medidas no restringirán el comercio.