Julio Gálvez
En el estado de Hidalgo, se ha observado una tendencia preocupante en la que la política se ha convertido en una meta individualista y aspiracionista para muchos ciudadanos.
Esta realidad se debe a la escasez de oportunidades y la falta de inversión privada que limitan las opciones de empleo y desarrollo profesional. Ante esta situación, muchos hidalguenses ven en el trabajo para el gobierno una forma de buscar beneficios personales, en lugar de una oportunidad para servir y mejorar la sociedad en su conjunto.
Hidalgo enfrenta desafíos económicos significativos, con una escasez de oportunidades de empleo y una falta de inversión privada en el estado. Los jóvenes graduados y los profesionales experimentados se ven obligados a competir en un mercado laboral saturado, lo que dificulta el acceso a empleos estables y bien remunerados. Ante esta situación, la política se ha convertido en una opción atractiva para aquellos que buscan asegurar su sustento y obtener beneficios individuales.
Dentro de este contexto, trabajar para el gobierno se percibe como una vía segura para obtener empleo y estabilidad financiera. Los puestos gubernamentales ofrecen beneficios, salarios competitivos y una sensación de seguridad laboral, lo que los convierte en una opción atractiva para aquellos que enfrentan dificultades en el sector privado. Esta realidad ha llevado a una mayor competencia y una actitud individualista, donde algunos buscan alcanzar cargos políticos como una forma de asegurar su propio futuro, sin considerar necesariamente el bienestar colectivo.
La falta de inversión privada en Hidalgo perpetúa este ciclo de aspiraciones individualistas. La ausencia de oportunidades económicas y la falta de confianza de los inversionistas limitan la creación de empleos en el sector privado. Esta situación empuja a más personas hacia la política, donde la competencia por los puestos gubernamentales se intensifica y las motivaciones personales a menudo superan el compromiso de servir a la comunidad.
Es fundamental que tanto los ciudadanos como los líderes políticos en Hidalgo cambien su enfoque hacia uno más centrado en el bienestar colectivo. Se requiere un esfuerzo conjunto para fomentar un entorno propicio para la inversión privada, la generación de empleo y el desarrollo económico sostenible. Además, es esencial promover una cultura en la que la política se vea como una oportunidad para servir a la sociedad y mejorar la calidad de vida de todos los hidalguenses, en lugar de ser una búsqueda de beneficios personales.
____________
En la fotografía podemos observar a los exgobernadores priistas de Hidalgo (ídolos de muchos), en la toma de protesta del gobernador morenista, Julio Menchaca, que sin importar ideología y en busca de sus intereses personales, seguramente ahora apoyan a morena, como sucedió con Omar Fayad 🤣