El capitalismo de cuates es un sistema económico y político que favorece a un grupo reducido de personas que se benefician del poder público.
En el estado de Hidalgo, este sistema ha sido implementado por los exgobernadores del Grupo Hidalgo, que han formado una red de corrupción con sus familiares, amigos y prestanombres, así como con diversos medios de comunicación que les dan legitimidad.
Estas personas han obtenido contratos, concesiones y recursos públicos de manera ilegal y arbitraria, por encima de las demás empresas, enriqueciéndose a costa del erario y de la población hidalguense.
El capitalismo de cuates es un sistema económico y político que favorece la corrupción, el nepotismo y el clientelismo.
En el estado de Hidalgo, una élite que ha dominado el poder desde hace décadas se apoderó del gobierno para volverse millonarios.
Estos exgobernadores han utilizado el erario público para enriquecerse a sí mismos y a sus allegados, creando una red de negocios ilícitos, contratos amañados y obras públicas innecesarias.
El capitalismo de cuates en Hidalgo ha generado una enorme desigualdad social, una baja calidad de vida y una falta de oportunidades para la mayoría de la población.