Vecinos de Cuautitlán Izcalli han señalado que la empresa Urbi, construyó desde 2006, dos fraccionamientos que serían la primera fase de urbanización en esa zona, pero todo se trató de un fraude,
En el Estado de México operó una especie de “Cártel Inmobiliario”, ya que las viviendas, que se vendieron entre 1.7 y 2.5 millones de pesos, fueron entregadas con vicios ocultos, de acuerdo con las denuncias de los vecinos, y, debido a que no existe el acta de término de obra, el municipio no les brinda servicios como bacheo y poda de árboles, por lo que los colonos denuncian que compraron a sobreprecio y el valor de sus casas oscilaría entre 1 y 1.5 millones de pesos, casi 40 por ciento menos de lo que les costó.