El Presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó la mañana de este martes 28 de febrero que la planta de Tesla, propiedad del empresario Elon Musk, se ubicará en Monterrey, Nuevo León.
"Van bien las cosas, platicamos ayer con el señor Elon Musk, el director de Tesla. Hay ya un entendimiento, sí van a dedicar la inversión a México y se va a establecer la planta en Monterrey, con una serie de compromisos para enfrentar el problema de la escasez del agua. Ellos van ayudar en este sentido", dijo AMLO en Palacio Nacional, en la Ciudad de México.
¿Por qué nunca llegan las inversiones a Hidalgo?
En este orden de ideas, es importante analizar por qué las grandes empresas no llegan a Hidalgo, un estado que se encuentra en el centro del país, tan cerca de la CDMX y tan lejos del desarrollo.
Hidalgo es como Venezuela, los proyectos de interés público siempre terminan convirtiéndose en proyectos de unos cuantos gracias a la corrupción política que quiere llevarse una tajada de todo.
Por ejemplo, empresas privadas como Uber no pueden ingresar a laborar a Hidalgo, porque los políticos son los dueños de los taxis e impiden la competencia. ¿Como es posible que una empresa como Tesla llegue a un lugar así?
De igual forma esta entidad federativa carece de independencia judicial y por ende de justicia; por ejemplo, el tribunal superior de justicia tiene que soportar estándares parecidos a los de países africanos en la materia, ya que los jueces se encuentran sometidos a los políticos, por lo que no existe un Estado de Derecho sólido en favor de la sociedad, sino en favor de la clase privilegiada.
De la misma forma, la Educacion, en Hidalgo se encuentra politizada, la Secretaría de Educacion Pública forma sus grupos de privilegiados, cercanos al secretario en turno y solo son favorecidas las escuelas donde existen influencias.
En materia de seguridad, Hidalgo es el estado con mayor huachicol del país, un reflejo de lo que se habla en este artículo donde sólo la clase política se beneficia del gobierno.
En términos generales, el influyentismo y la corrupción, inhiben un ambiente de inversión y de competencia libre para que las empresas quieran llegar al Estado, ya que en Hidalgo sólo son favorecidos unos cuantos, los mismos de siempre que inhiben la libre competencia.