Gran Militar Mexicano, Posteriormente Dictador de México.
Por Miguel Ángel Serna Ortega
Investigador Histórico.
José de la Cruz Porfirio Díaz Mori (Oaxaca de Juárez, Oaxaca, 15 de septiembre de 1830 - París, Francia, 2 de julio de 1915) fue un militar y dictador mexicano, que ejerció el cargo de presidente de México, en nueve ocasiones; la primera, del 24 de noviembre de 1876 al 6 de diciembre de 1876 (después del triunfo de la Revolución de Tuxtepec, ocupando el cargo de forma interina ); y, la segunda vez, del 17 de febrero de 1877 al 5 de mayo de 1877. Nuevamente, ocupando el cargo de forma interina, del 5 de mayo de 1877 al 30 de noviembre de 1880 (después de haber sido elegido Presidente). Posteriormente, desempeñó la presidencia para los periodos: 1884-1888, 1888-1892, 1892-1896, 1896-1900, 1900-1904, 1904-1910 y 1910-1911.
Antes de asumir la presidencia fue un militar destacado, quién brilló por su participación en la Segunda Intervención Francesa en México. Combatió en la Batalla de Puebla, el Sitio de Puebla, la Batalla de Miahuatlán y en la Batalla de la Carbonera. Resaltaron sus acciones militares en el estado de Oaxaca, en donde organizó guerrillas contra los franceses. Porfirio Díaz, el 2 de abril de 1867, tomó Puebla, y el 15 de junio, recuperó para las tropas republicanas la Ciudad de México.
Tomó armas contra el gobierno federal, en dos ocasiones, la primera contra Benito Juárez con el Plan de la Noria, y, posteriormente, contra Sebastián Lerdo de Tejada, enarbolando el Plan de Tuxtepec. Tras el triunfo del segundo plan, Díaz asumió la presidencia.
Porfirio Díaz nació en Oaxaca, en la antes provincia de Antequera, la noche del 15 de septiembre de 1830 y fue bautizado por su padrino José Agustín Domínguez ese mismo día. Era el sexto de siete hijos, concebidos en el matrimonio de José Faustino Díaz Orozco y María Petrona Cecilia Mori Cortés, quienes se casaron en1808, cuando el padre de Díaz manejaba los negocios de una empresa de minas y metales de Cinco Señores, San José y El Socorro, en el distrito de Ixtlán. Poco tiempo después, José Faustino se enroló en el ejército insurgente de Vicente Guerrero, donde fungió como veterinario, y, tras un tiempo, fue nombrado coronel. En1819, tras once años de matrimonio, la pareja concibió a su primera hija, Desideria. Dos años después nacieron los gemelos Cayetano y Pablo, quienes murieron en la infancia; luego vino el nacimiento de dos mujeres más, Manuela y Nicolasa. En 1830 nació Porfirio, y en 1833, el hermano menor, Felipe Díaz Mori.
En 1820, los Díaz se establecieron en el centro de la ciudad de Oaxaca, donde compraron un mesón frente al templo de la Virgen de la Soledad, que alojaba a los viajeros que llegaban a la ciudad a comerciar. En este tiempo, José Faustino Díaz montó un negocio dedicado a la herrería, lo que le produjo ganancias que hicieron que su familia tuviera una situación económica holgada durante algunos años.
Durante el verano de 1833, se desarrolló una epidemia de cólera morbus, en la ciudad de Oaxaca. A principios de agosto, José Faustino Díaz se vio infectado, y el 29 de agosto dictó su testamento, dejando todos sus bienes a su esposa, Petrona Mori. Poco tiempo después, el mesón ya no fue rentable y la familia adquirió el Solar del Toronjo. Así es como describe Porfirio Díaz en sus "Memorias", la situación familiar tras la muerte de su padre: "Su buen juicio y sus deberes de madre le proporcionaron la manera de prolongar por mucho tiempo aquellos escasos recursos”. Las jovencitas Díaz: Manuela, Desideria y Nicolasa se dedicaron a tejer, costurar, y a hacer buenos postres y alimentos para vender y mantener un sustento económico en la familia; Petrona Mori, sembró nopales para la producción y venta de la "Grana Cochinilla". En uno de los patios del Solar del Toronjo, la familia criaba cerdos.
En 1835, Porfirio ingresó a la Escuela Amiga, institución educativa controlada por la parroquia de Oaxaca donde aprendió a leer y escribir. Pasaba sus días, jugando con amigos y vecinos del Solar del Toronjo. Se cuenta que en una ocasión, su hermano Félix se quemó la cara con pólvora, y de ese incidente devino su sobrenombre "El Chato". Sobre este "incidente" el escritor John Kennet Turnen menciona en el libro "México Bárbaro" publicado en 1910 por Charles H.Kerr & Company que fue el mismo Díaz cuando era un niño, quien enojado con su hermano Félix, le puso pólvora en la nariz mientras este dormía y le prendió fuego.
El padrino de Porfirio, José Agustín Domínguez y Díaz, quien era sacerdote y llegaría a ser Obispo de Antequera, recomendó a su madre apresurar el ingreso de su hijo al Seminario Tridentino de Oaxaca. En 1843, Porfirio ingresó al seminario, comenzando con un bachillerato en artes. Durante tres años, hasta 1846, Porfirio estudió física, matemáticas, lógica, gramática, retórica y latín. En esta última asignatura logró altas calificaciones, por lo que ante la necesidad de conseguir dinero para su familia, empezó a darle clases de latín a Guadalupe Pérez, hijo del Lic. Marcos Pérez.
Al producirse la Intervención Norteamericana en México, en el seminario de Oaxaca surgió la inquietud de luchar contra los invasores, idea que fue respaldada y alentada por los sacerdotes y maestros. En octubre de ese año, varios alumnos se dirigieron a ver al gobernador del Estado y solicitarle su ingreso al ejército nacional. Porfirio Díaz estaba en ese grupo, y los cadetes fueron asignados al Batallón de San Clemente. Sin embargo, poco después, la guerra terminó y los estudiantes no pudieron ir a pelear.