Por Julio Gálvez
Twitter: @juliogalvezb
¿Cómo celebrar un triunfo electoral cuando el silencio del pueblo es contundente ante el ruido de los candidatos? Quizás nuestra clase política no se ha dado cuenta que en los últimos procesos electorales solo votó el 30% del electorado.
Por lo anterior, es importante que los mexicanos reflexionemos sobre la forma en la que ejercemos nuestro derecho a votar, toda vez que gracias al "voto nulo" y al abstencionismo, en varios estados del país como sucedió en Hidalgo, Nayarit y Coahuila, en la actualidad contamos con representantes populares que obtuvieron el triunfo con los votos del 7% del total del padrón electoral; o sea, 7 de cada 100 ciudadanos votaron por el PRI, por lo que somos gobernados por políticos sin legitimación democrática, políticos sin pueblo ¿A esto se le puede llamar democracia? ¿A esto se le puede llamar triunfo?
El gran abstencionismo que se ha vivido en las ultimas elecciones locales en diferentes estados es el reflejo del hartazgo que el pueblo tiene hacia su clase política, los resultados por mucho se alejan de una democracia real y la violencia se seguirá esparciendo como plaga a lo largo de todo México, debido a que el gobierno carece de legitimación para controlar las problemáticas que nos agobian.
Por lo anterior, es importante que los mexicanos reflexionemos sobre la forma en la que ejercemos nuestro derecho a votar, toda vez que gracias al "voto nulo" y al abstencionismo, en varios estados del país como sucedió en Hidalgo, Nayarit y Coahuila, en la actualidad contamos con representantes populares que obtuvieron el triunfo con los votos del 7% del total del padrón electoral; o sea, 7 de cada 100 ciudadanos votaron por el PRI, por lo que somos gobernados por políticos sin legitimación democrática, políticos sin pueblo ¿A esto se le puede llamar democracia? ¿A esto se le puede llamar triunfo?
El gran abstencionismo que se ha vivido en las ultimas elecciones locales en diferentes estados es el reflejo del hartazgo que el pueblo tiene hacia su clase política, los resultados por mucho se alejan de una democracia real y la violencia se seguirá esparciendo como plaga a lo largo de todo México, debido a que el gobierno carece de legitimación para controlar las problemáticas que nos agobian.
Los priístas celebran triunfos que parecen todo menos triunfos cuando los ciudadanos han hablado a través del silencio. El PRI es la principal fuerza política del país, gracias a su añeja maquinaria electoral que se aprovecha de la pobreza de la gente para comprar voluntades; pero sobre todo, gracias a la manipulación mental de los medios institucionales de comunicación, ya que ante la falta de talento para convencer, nuestros políticos tienen que recurrir a la censura para imponer sus programas gubernamentales.
Sin embargo, debemos ser realistas, a un gobierno sin pueblo no se le puede llamar gobierno, nuestros políticos están solos, para ellos las próximas elecciones de 2015 sabrán a derrota, ya que ¿Como gobernarán en un ambiente de paz social con un 70% de abstencionismo? La violencia aumentara gradualmente junto con el hartazgo popular, por lo que ante esta situación, nuestros gobernantes no podrán contener a millones de mexicanos inconformes.
México es una bomba de tiempo, debemos hacer conciencia, el futuro de nuestro país esta en nuestras manos, dentro de poco tiempo iniciará un proceso electoral en dónde a demás de la renovación del Congreso Federal, 17 entidades federativas elegirán 9 gobernadores, 661 diputados locales y 1,015 Ayuntaminetos, por lo que ante el fraude electoral que se avecina, estallará una revuelta social sin precedentes debido a que los mexicanos se encuentran en el limite de la tolerancia a este gobierno.
Quizás las próximas elecciones de 2015, sean la ultima oportunidad de la ciudadanía para salir a votar en contra del autoritarismo que impera en todo el territorio nacional, ya que la dictadura perfecta buscará permanecer otros 86 años en el poder.
Anular el voto, es ayudar al sistema que cuenta con una maquinaria electoral aplastante.
Anular el voto, es ayudar al sistema que cuenta con una maquinaria electoral aplastante.
