Editorial
Durante la semana pasada, el expresidente de México, Felipe Calderon Hinojosa, reconoció ante diversos medios de comunicación que se siente triste por la situación que atraviesa el PAN, luego de filtrarse un video donde aparecen algunos panistas en una fiesta con bailarinas exóticas durante su reunión plenaria.
En entrevista radiofónica, Calderón dijo que desearía hablar “largo y tendido” sobre la actualidad panista, aunque por el momento sólo podía sentir tristeza y pena. “Es un proceso de degradación y descomposición moral, de corrupción que no sé qué límite pueda tener”, refirió.
Respecto a la remoción de Luis Alberto Villarreal y Jorge Villalobos, de sus respectivos cargos, ordenada por el presidente nacional del PAN, Gustavo Madero, Calderón se dijo confiado en que esta decisión le brinde mayor confianza a la población.
De acuerdo con lo sucedido al interior del Partido Acción Nacional, es importante mencionarse que de cara a las próximas elecciones de 2015, los del blaquiazul se han quedado sin resultados que presumir como gobierno y con una fama de ser tan corruptos como cualquiera. Su identidad de antaño de gente proba, no existe más.
El tiempo de la elección esta encima y por ello los políticos ya empiezan a mover sus piezas de ajedrez, al parecer el Pacto por México dejó de tener sentido, por lo que el gran despilfarro de dinero ha comenzado.
Los políticos con tal de conseguir sus nuevos cargos de elección popular, estarán dispuestos a todo, los video escandalos, los actos de corrupción serán el pan nuestro de cada día, ya que a nuestros gobernantes solo les interesa “el hueso” aunque el pueblo cada día tenga menores esperanzas de vida.