Nunca te eches de enemigo a un periodista, te puede hacer crecer como la espuma o te puede hundir en el lodo.
Por la editorial
La organización Artículo 19 emitió una alerta para la politóloga y columnista Denise Dresser, luego que acusara ser intimidada por una columna en la que citaba una investigación publicada por The New York Times, cuyos autores, Craig Pyes y Sam Dillon, obtuvieron el premio Pullitzer por revelar información de inteligencia en la que se acusa a Manlio Fabio Beltrones (diputado y coordinador de la bancada del PRI en la Cámara de Diputados) de haber brindado protección a narcotraficantes en Sonora cuando fue gobernador en esa entidad.
Artículo 19 señala que tras la publicación de la citada columna, el Coordinador de Comunicación Social del Grupo Parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados, Jesús Anaya, emprendió una campaña de desinformación y de desprestigio contra Dresser, quien al ser entrevistada por la organización afirmó sentirse intimidada.
Anaya publicó en el mismo diario una carta en donde acusó a Dresser de ser una “supuesta periodista” y “una analista sin escrúpulos”; además, refirió, el contenido de la nota de The New York Times era “falso y calumnioso en exceso”.
La organización también acusa que en las redes sociales circula una encuesta con acusaciones personales al trabajo profesional de Denise Dresser y señala que resulta preocupante que se ha obtenido información personal y estrictamente privada de la columnista.
Finalmente, Artículo 19 hace un llamado para que el Estado Mexicano garantice la seguridad e integridad de Denise Dresser, así como al Mecanismo de Protección a personas Defensoras de los Derechos Humanos para que de manera inmediata otorgue medidas urgentes encaminadas a salvaguardar su integridad personal y la de su labor informativa.
Es lamentable lo que sucede en México en relación con la seguridad de los periodistas, con el regreso del PRI, la cosas han empeorado en materia de libertad de expresión y lo sucedido con Denise Dresser es otro gramo de dinamita a la gran bomba de tiempo que le estallará al gobierno si no pone un alto a los ataques contra la prensa.
El gremio periodístico debería unirse ante la realidad por la que atraviesa nuestro país, en cualquier rincón se busca limitar a la libertad de expresión, si no es mediante la reforma de telecomunicaciones es a través de la violencia. Hoy en día, lo ocurrido a Dresser le puede pasar a cualquiera.
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Fuente: Animal Político.
