Por María Gil
Analista Político
“Cuando el rio suena es porque agua lleva”, y sobre todo cuando existe ¡fuego amigo! como sucede con los caciques sindicales, que no quieren dejar de succionar el presupuesto y que le han puesto piedras en el camino a Sinuhé Ramírez, ya que este año al entrar en vigor la reforma educativa, dejarán de existir los contratos colectivos, los pliegos petitorios y los pliegos anuales con los que Moisés Jiménez y Mirna García “los cacicotes”, se hicieron millonarios, gracias a las negociaciones que manejaban por debajo de la mesa.
Dicen los mal pensados que la orden viene desde arriba, para desestabilizar al líder sindical, y crearle un gran conflicto no solo ante los agremiados, sino también ante sus aliados, y derribete ensuciar el trabajo del Gobernador, situación que se duda, ya que Francisco Olvera, ha tenido la habilidad de saber conciliar con todos los grupos políticos del Estado y evitar que el más grande sindicato que existe en Hidalgo se divida como quiere el ¡fuego amigo!
Los jubilados han hecho el compromiso de apegarse estrictamente a los lineamientos de la reforma educativa, aunque el gobierno federal no les permita la “herencia” de sus plazas, porque “los cacicotes” no quieren dejar pasar ese buen “negocio lucrativo”. ¿Será que Elba Esther, sigue teniendo sus tentáculos en Hidalgo, a través de Moisés y Mirna, para seguir viviendo como reina en Tetepan? La realidad es que dentro desde el mismo gabinete del Presidente Peña Nieto, alguien esta jugando chueco.
No pasa desapercibido que el periodico Reforma, hace algunos meses hizo un reportaje sobre la denuncia que existe en la PGR en contra de los ex lideres sindicales Mirna Garcia y Moisés Jiménez, por enriquecimiento ilicito; así mismo es importante mencionarse que la primera enfrenta una investigación por vender un terreno propiedad del sindicato y lucrar con plazas de maestros en virtud de que en Hidalgo, nunca se hizo justicia durante el sexenio pasado, por lo que la pelota continua en el aire.
“Cuando el rio suena es porque agua lleva”, y sobre todo cuando existe ¡fuego amigo! como sucede con los caciques sindicales, que no quieren dejar de succionar el presupuesto y que le han puesto piedras en el camino a Sinuhé Ramírez, ya que este año al entrar en vigor la reforma educativa, dejarán de existir los contratos colectivos, los pliegos petitorios y los pliegos anuales con los que Moisés Jiménez y Mirna García “los cacicotes”, se hicieron millonarios, gracias a las negociaciones que manejaban por debajo de la mesa.
Dicen los mal pensados que la orden viene desde arriba, para desestabilizar al líder sindical, y crearle un gran conflicto no solo ante los agremiados, sino también ante sus aliados, y derribete ensuciar el trabajo del Gobernador, situación que se duda, ya que Francisco Olvera, ha tenido la habilidad de saber conciliar con todos los grupos políticos del Estado y evitar que el más grande sindicato que existe en Hidalgo se divida como quiere el ¡fuego amigo!
Los jubilados han hecho el compromiso de apegarse estrictamente a los lineamientos de la reforma educativa, aunque el gobierno federal no les permita la “herencia” de sus plazas, porque “los cacicotes” no quieren dejar pasar ese buen “negocio lucrativo”. ¿Será que Elba Esther, sigue teniendo sus tentáculos en Hidalgo, a través de Moisés y Mirna, para seguir viviendo como reina en Tetepan? La realidad es que dentro desde el mismo gabinete del Presidente Peña Nieto, alguien esta jugando chueco.
No pasa desapercibido que el periodico Reforma, hace algunos meses hizo un reportaje sobre la denuncia que existe en la PGR en contra de los ex lideres sindicales Mirna Garcia y Moisés Jiménez, por enriquecimiento ilicito; así mismo es importante mencionarse que la primera enfrenta una investigación por vender un terreno propiedad del sindicato y lucrar con plazas de maestros en virtud de que en Hidalgo, nunca se hizo justicia durante el sexenio pasado, por lo que la pelota continua en el aire.
