Por Julio José Gálvez Méndez
Columna publicada el 17 de febrero de 2008
La extraordinaria gesta patriótica del más grande presidente del siglo XX, General Don Lázaro Cárdenas, con la expropiación del petróleo, esa obra patriótica como el reparto de tierras, ha sido opacada por nuestros políticos “glotones”, quienes a lo largo de la historia han saqueado Pemex una y otra vez, no se sabe exactamente por qué, pero la realidad es que elección tras elección cantidades millonarias son extraidas de las arcas de Petróleos Mexicanos, y año con año son gastadas en vano y sin fin alguno, o al menos no que sea útil para el pueblo.
Los despilfarros realizados con los contratos otorgados por la administración de Pemex, el gigante sindicato, encabezado por el que en una ocasión fue Senador de la República por Hidalgo, al que conoció su campaña política ¿Podemos creer en los políticos? Esos políticos que son unos “glotones” de Pemex, como lo es Carlos Romero Deschamps.
Políticos, gobernadores, alcaldes son los dueños de las concesiones de las gasolineras; son políticos, los dueños del petróleo en otras entidades de la república, cuando dichas gasolineras, deberían ser de Pemex, no de los millonarios políticos y empresarios, tal vez serían más baratos los carburantes, pero los políticos empresarios se llevan “la tajada de león”.
Miles de aviadores “tiene Pemex”, no solo del sindicato del rey “Carlos Romero”, sino de miles de poderosos que han encontrado en la paraestatal la caja grande del gobierno, en pocas palabras nuestros políticos han convertido a Petróleos Mexicanos, en “un barril sin fondo”, ya que sale más barato importar carburantes que producirlo en México. Se decía que a la esposa de un Ex Presidente de la República, le otorgaron un dólar por barril, siendo que exportaban 3 millones y medio de barriles diarios, lo que quiere decir, que a esa primera dama, le tocaban 3 y medio millones de dólares diarios, en seis años, la citada familia presidencial era “cuatro millonaria” esto solo unos cuantos puntos de la intención de los antipatriotas, que aman a las potencias extranjeras, para que se privatice Pemex, la realidad es que la corrupción y la impunidad se han adueñado de México.
