Editorial
En la Constitución de 1917 se estableció que el dominio y explotación del petróleo son exclusivos de la nación, pero sin embargo el crudo continuaba en manos de algunas empresas extranjeras y fue hasta el año de 1938, cuando el Ex Presidente Lázaro Cárdenas lo expropio para regresárselo a los mexicanos. Hoy en día, es un insulto a la inteligencia y a la memoria del pueblo querer pretender que sea aprobada una reforma que permita a los extranjeros llevarse nuestros bienes nacionales, ya que dejar ir lo ultimo que le queda a la nación sería como empobrecer más a México y dejarlo como un pueblo de cuarta, tal y como dice el intelectual Alfredo Jalife.
Ante el exceso de información respecto a la reforma energética, es necesario un debate y sobre todo que se informe verdaderamente sobre los intereses que están detrás de la reforma, ya que reformar el articulo 27 constitucional, sería el peor error para la nación. Históricamente ya hemos pasado por esto y todo resulto mal.
Por su parte, Andrés Manuel López Obrador, el 8 de septiembre demostrará la fuerza y el poder de convocatoria que tiene; le mostrará al mundo que los mexicanos no quieren la reforma y una vez más pondrá en duda la legitimad del gobierno de México ante decenas de países extranjeros que comprarán un problema.
Aunque las opiniones están divididas, dice el PAN que el PRI se quedo corto en el proyecto de reforma, mientras que el PRD va con un doble discurso, la realidad es que por un lado no quieren romper con el pacto por México y por el otro dicen que defenderán el petróleo cuando realmente lo que tratan de lograr es que el distrito federal se convierta en otra entidad federativa, y que el que ganaría seria Miguel Ángel Mancera.
Ante tanto caos, los analistas han señalado que políticamente por donde se le vea pierde el PRI, ya que este duro golpe al pueblo, junto con la reforma fiscal podría costarle la presidencia de la república y desatar un levantamiento de violencia a lo largo de todo el territorio nacional ¿Cómo piensan aprobar una reforma energética eficiente cuando ni siquiera se combate la corrupción de PEMEX? El petróleo en México será el negocio de unos pocos, la caja grande de un partido (porque ahí seguirá Romero Deschamps) y las sobras para los ciudadanos porque sólo en el país de las maravillas los costos de los energéticos bajarán.
Pobre México, se privatizará el sector energético, los políticos ganarán sus respectivas comisiones y el sindicato de PEMEX seguirá intacto porque a pesar de todo el diezmo para las elecciones no se puede perder ¿Si no para que le sirve el petróleo al PRI?