Por Armando Nieto
Twitter: @ArMaNdevil
“La ventaja de un Instituto Nacional
Electoral es que desaparecerían los inútiles y costos organismos y tribunales
electorales estatales.” – José Luis Soberanes; Profesor e investigador universitario en el
área jurídica. Antiguo ombudsman nacional de México.
El INE o Instituto Estatal Electoral es un organismo que
vendría a sustituir al IFE, al igual que a los 32 institutos equivalentes en
los Estados, dicho de otra forma a los tribunales electorales locales. El INE
gozaría de autonomía constitucional, y seria integrado por diez comisionados y
un presidente. El INE seria la autoridad responsable de organizar los comicios
para elegir a los representantes tanto
del nivel federal, así como el local. Una de las ventajas del INE sería que
dicho organismo estaría facultado para fiscalizar la procedencia y el destino
de todo tipo de recursos que realicen tanto los partidos políticos así como sus
candidatos, esto en los dos ámbitos, tanto a nivel federal así como dentro del
nivel local, aunado a esto también se buscaría evitar casos de financiamiento
paralelo durante las campañas políticas y el rebase de los topes de campaña,
también dentro de esta propuesta se encuentra que el Congreso de la Unión
realice una ley única electoral que regule los procesos federales así como
los locales.
Pues bien este
instituto nacional electoral trae consigo más beneficios que desaciertos, ya
que en la actualidad es bien sabido que los gobernadores tienen una fuerte
injerencia en los tribunales electorales locales y con esto vician las
elecciones electorales, al igual que muchas de las ocasiones las los actos
impugnados ante los tribunales locales acaban conociendo el TEPJF (Tribunal
Electoral del Poder Judicial Federal), demostrando que dichos tribunales
locales son de mero trámite, y son de un gasto innecesario para los Estados.
Pues bien la iniciativa del INE parece ser algo muy beneficiosos para nuestro
país y de no concretarse dicha iniciativa deberíamos estar hablando de la
creación de nuevos, mejores y óptimos mecanismos para evitar los grandes
delitos electorales que se comenten durante los comicios.